El 5 de abril se cumplió el aniversario número 17 de la muerte de Kurt Cobain. Para recordarlo, los habitantes de Aberdeen, Washington, iudad natal del líder de Nirvana, develaron un monumento a su memoria. Paradójicamente, la efigie de piedra en forma de guitarra eléctrica fue colocada muy cerca del puente Young Street Bridge, debajo del cuall Kurt comenzó a consumir crack y en donde se presume que escribió canciones como «Something in the way».
Es curioso que un poblado conservador, que causó tantas frustraciones a Kurt hoy le rinda tributo como uno de sus «habitantes destacados». Además de su adicción a la heroina, precursor del crack que comenzó a consumir durante sus años de juventud en las calles de Aberdeen, el músico padecía una condición mental de déficit de atención y bipolaridad. Según las autoridades forenses, la combinación de estas 3 enfermedades fueron las que orillaron al músico a suicidarse de un disparo en la cabeza a la edad de 27 años.