Por Enrique Dorantes
Muchas historias se sitúan en aquella Francia en la que Hitler impuso condiciones; para muestra la última película de Quentin Tarantino, Inglourious Basterds, cuyas primeras líneas se parafrasean para dar título al presente texto; no se hablará de la excelente cinta del director norteamericano, sino de otra historia que se sucedió bajo aquel dominio alemán, El Décimo Hombre, novela con la que Graham Greene (Inglaterra 1904- Suiza 1991) se consagra como gran figura de la narrativa europea.
Con El Décimo Hombre, Greene se remonta a la segunda guerra mundial, específicamente a un campo de prisioneros, en el que judíos esperaban con indiferencia su hora final. Entre ellos, reconocemos a nuestro protagonista, Jean Louis Chavel, quien se distingue de los demás por ser un hombre de elevado estatus económico e intelectual en comparación con sus compañeros, es un abogado joven, pero bien reconocido en el gremio.
Un oficial Nazi casi en pañales pero que para su fortuna se encontraba del lado ganador, anuncia a los cuarenta hombres que comparten la prisión, que en represalia de un asesinato cometido en contra de un camarada alemán, uno de cada diez de los hombres ahí presentes será elegido para el paredón, la decisión es de ellos mismos, ¿a quién quieren aventar a los perros?
La vida de los prisioneros quedará en las invisibles manos del azar. El sorteo es sencillo pero la apuesta es macabra. Cuarenta papeles en un zapato, cuatro de ellos marcados con una equis, la equis que escribirá el destino de los desafortunados. Jean Lous Chavel obtiene la peor de las noticias, una equis en su papel.
¿Qué hacer ante un resultado tan horrible? Para Chavel es la vida o la fortuna; ofrece todo lo que tiene, su casa, su dinero, todas sus propiedades a cambio de un papel en blanco. Un voluntario en esa misma celda con un papel no tachado decide dejarle a su familia lo mejor posible, trato hecho.
Una narración excelente de Greene con un lenguaje sumamente sencillo, pero que introduce el suspenso, el drama y los juegos mentales en breves páginas. Sin olvidar claro, la perfecta ambientación sustentada por una descripción que retrata el comportamiento del ser humano en situaciones adversas y por supuesto, de la misma sociedad durante y después de un evento tan devastador como una guerra.
Absolutamente recomendable, una novela que no sólo nos pone a pensar en lo catastrófico que sería la adversidad, sino en el valor del endiosado billete cuando la vida está de por medio. ¿Qué hacer en caso de sacar un papel tachado?
El Décimo Hombre
Graham Greene
Editorial Seix Barral, Booket
Barcelona 2002