Hay películas altamente mieleras. “500 días con ella” no es una película de amor sino de desamor, pero que a todos los enamorados les encantará. Es el primer largometraje de Marc Webb, quien ha obtenido premios por ser director de videoclips, de este curioso dato se desprende el análisis de esta cinta.
“500 días con ella”, esta clasifica como una comedia romántica que trata sobre la relación de Summer y Tom, pero cuando Summer rompe con Tom, él decide recordar los 500 días que paso con ella para saber que fue lo que hizo mal.
Lo exquisito de esta cinta es que todos alguna vez hemos hecho un soundtrack de nuestra vida, esta cinta lo hace a la perfección, pues mientras la historia es relatada, las escenas se van entretejiendo con alguna canción que pinta de un color especial el momento triste o alegre que vive el personaje.
Esta película es lo que las otras no lo son, pues mientras que en una comedia romántica la historia siempre es llevada a un final feliz utópico, en esta podemos ver que aunque existe la fantasía también existe la realidad, pues el director se encarga de abofetearnos por momentos cuando la pantalla es dividida para ver las expectativas y la realidad de Tom.
La fotografía y la musicalización me dejan sorprendida, pues no llegar a ser pretenciosa, pero si complementa a la historia. Sin embargo, el guión, a pesar de contar con un narrador, no me parece espectacular, creo que pudo haber sido mejor.
El momento en el que el musical hace su aparición, es como transportarnos a un mundo rosa (si querido lector, ese en el que se siente que el piso es una nube), por eso es que desde mi perspectiva y para los que odian los musicales, el musical es soportable. Solo por eso, se le perdona esa escena a Webb.
La cinta se estreno el pasado 5 de octubre en el Festival de Cine de Morelia. El título original es “500 days of Summer” y para México ha sido traducido a “500 días con ella”.