En el marco de la Feria del Libro de Oaxaca, la noche del miércoles 12 de Noviembre, la editorial Anagrama presentó una lectura del escritor Irvine Welsh en el Museo Universitario del Chopo de la Ciudad de México.
El autor escocés, conocido mundialmente por novelas como Trainspotting, Porno y Acid House que han sido llevadas al Cine visitó la Ciudad de México como parte de las actividades de promoción de su más reciente novela Skagboys, la precuela de Trainspotting y parte de la trilogía que concluye con la novela Porno.
En Skagboys Welsh redefine a Renton, Spud Murphy, Sick Boy y Begbie, los personajes de Trainspotting, pero en una época anterior a la de la novela de 1993 en la que narra su duro contexto familiar y por qué se volvieron adictos a la heroína.
Después de la intervención del escritor Bill Hillman, amigo de Welsh, quien leyó un fragmento de su novela El viejo vecindario, Irvine Welsh leyó un fragmento de su novela más reciente Skagboys, ante una audiencia conformada por lectores jóvenes que rebasaron la capacidad del Auditorio del Museo del Chopo por lo que se habilitó una pantalla de transmisión en el lobby y cafetería del Museo.
Con la ayuda de un traductor, Welsh conversó con Fausto Ponce y Sergio Zurita. El escocés confesó que en su juventud como Punk en Escocia lo único que le interesaba eran los deportes y la música: «Pero no fui bueno en nada de eso, si eres malo en el fútbol y tocando la guitarra haces el ridículo, pero si eres malo en el box te rompen la cara, así que tras fracasar en esas cosas comencé a escribir y fue en lo que tuve éxito“c
Respecto al éxito de sus libros, en los que aborda historias de gente perdedora, Welsh expresó que: “para mí la vida tiene que ver con el fracaso, no el éxito que es menos interesante. Las cosas tienen que salir mal”. Además: “el escritor debe mostrar las consecuencias del mal comportamiento”.
El escritor de 56 años compartió con los lectores que la generación del Punk escocés, a la cual pertenece, fue la última que tuvo oportunidades reales de acceder a la educación en su país: «En ese sentido, los personajes de Skagboys son malos, porque tuvieron que sobrevivir en un contexto hostil y sin oportunidades».
Cuestionado sobre la naturaleza oscura de sus personajes, Welsh añadió: «Mis personajes son como muchos de mis amigos. Hay gente que es muy cabrona y no sabes porque son tus amigos».
Cuestionado por el público sobre sus procesos creativos, el escritor comentó: «Cuando estoy construyendo escucho mucho a la gente en la calle, en el transporte público y tomo apuntes. Después, cuando me siento a escribir me aislo en el silencio, pero la gran ventaja que tengo es que puedo moverme muy fácilmente entre los dos contextos».
Al final de la charla, el escritor firmó libros ante cientos de lectores por más de una hora, lo cual confirma que pese a las estadísticas, en México existe un gran sector de lectores jóvenes exigentes y que buscan lecturas retadoras como las de Welsh.